Mis prácticas son un cúmulo de pruebas y errores, un  constante aprendizaje...

 Lo interesante de esta incertidumbre es que me permite conservar una ávida curiosidad frente a todo lo que acaece en mi entorno, manteniéndome en constante ejercicio para mirarme en las múltiples expresiones de la naturaleza especulando con respecto a procesos fundamentales y perecederos. 

Me gusta plantear mi trabajo como un laboratorio de experimentos constantes, un complejo deambular por lo que ofrece la existencia.